Con la creciente popularidad del teletrabajo, cada vez más personas están aprovechando la oportunidad de trabajar en el extranjero desde su país de origen en Latinoamérica. Trabajar en un lugar diferente puede ser una experiencia emocionante y enriquecedora, pero también puede presentar desafíos únicos. Si estás considerando trabajar en el extranjero como teletrabajador, aquí hay algunos consejos para que la transición sea lo más suave posible:
Verificar la conexión a Internet: Antes de comenzar a trabajar en el extranjero desde Latinoamérica, asegúrate de tener una conexión a Internet estable y rápida. Investiga los proveedores de Internet locales y asegúrate de tener un plan adecuado que te permita trabajar sin interrupciones, en este caso, la fibra óptica es lo más recomendable con un mínimo de 100mbps de velocidad.
Ajustar la zona horaria: Si estás trabajando en una zona horaria diferente, es importante que ajustes tus horarios para asegurarte de estar disponible durante las horas de trabajo de tu empresa. Considera la posibilidad de trabajar horas flexibles o de encontrar un horario que funcione tanto para ti como para tu equipo. La diferencia de horarios a veces varían de acuerdo al verano e invierno ya que algunos países como Canadá y algunos países Europeos suelen adelantar o retrasar sus relojes para aprovechar mejor la luz solar.
Conocer las regulaciones fiscales: Trabajar en el extranjero puede tener implicaciones fiscales diferentes a las de tu país. Averigua si necesitas registrarte o pagar impuestos en el país de destino y si existen acuerdos de doble tributación entre el país de origen y el de destino. En algunos casos, los servicios tecnológicos están exentos de pagar impuestos.
Preparar un espacio de trabajo: Es importante tener un espacio de trabajo adecuado y cómodo en el que puedas trabajar de manera efectiva, sin ruidos externos ni distracciones. Si estás en un lugar temporal, considera opciones como espacios de coworking o alquileres de oficinas, sobretodo para tener reuniones vía zoom o meet de manera efectiva.
Conocer la cultura laboral local: Cada país tiene su propia cultura laboral única. Investiga la cultura laboral local para asegurarte de que estás trabajando de manera efectiva y respetando las normas y costumbres locales además de tener un buen nivel de conocimiento del idioma.
Mantener una comunicación abierta con el equipo: Es importante mantener una comunicación abierta y regular con tu equipo. Utiliza herramientas como correo electrónico, mensajería instantánea y videoconferencia para mantener una comunicación clara y efectiva.
Aprovechar la oportunidad de explorar el lugar: Trabajar en el extranjero como teletrabajador también ofrece la oportunidad de explorar un lugar nuevo. Aprovecha el tiempo libre para conocer la cultura local, disfrutar de la comida y hacer turismo.
En conclusión, teletrabajar en el extranjero puede ser una experiencia emocionante y enriquecedora, pero también puede presentar desafíos únicos. Si estás considerando trabajar en el extranjero como teletrabajador, es importante tener en cuenta los consejos anteriores para asegurarte de que la transición sea lo más suave posible y puedas aprovechar al máximo esta experiencia única.
